El corazón de este puerto esconde bellos rincones para ser descubiertos durante tu próxima visita, aquí te contamos un poco de lo que encontrarás en tu recorrido.
Comienza por la Plaza Principal, a la cual podrás acceder muy fácilmente por la avenida Juárez, la principal vía del centro. Allí podrás disfrutar un delicioso tejuino, una de las bebidas más típicas de esta región, mientras paseas por el kiosco o te relajas bajo las sombra de los árboles.
Numerosos locales comerciales y de alimentos rodean a la plaza, si tienes antojo, te recomendamos altamente probar los famosos sopes de ostión, una delicia desconocida para la mayoría de los foráneos. También encontrarás el Palacio Municipal, la antigua y la nueva Parroquia de San Blas.
A un costado de la antigua parroquia, se localiza el Mercado Municipal, donde podrás encontrar algunos de los frutos más exóticos que estas ricas tierras producen, por ejemplo: la singular yaca, guanábanas o lichis, sin olvidar a las famosas cocadas.
Sobre la misma avenida Juárez, encontrarás diversos establecimientos como la galería de arte huichol; el bello hotel Hacienda Flamingos, el cual es una de las construcciones más antiguas y mejor conservadas de San Blas; y finalmente la Antigua Aduana, hoy Casa de la Cultura.
Al final de la avenida, llegarás a uno de los embarcaderos ubicados sobre el Estero del Pozo, de este lugar podrás zarpar hacia alguno de los inolvidables paseos en bote por San Blas y disfrutar los encantadores atardeceres.
Si bien, aún se está trabajando para lograr una mayor armonía estética en el Centro Histórico, vale la pena resaltar la esencia netamente mexicana que puede ser apreciada al recorrer sus calles, siendo ésta uno de los principales atractivos de San Blas, un puerto diferente con gran visión a futuro.
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